El Archivo Regional de Murcia recibirá los partes médicos de los doctores Sánchez-Parra, inolvidables cirujanos de la plaza de toros de la Condomina / Por Diego Vera.
El Archivo Regional de Murcia recibirá el próximo 22 de febrero los partes médicos de los doctores Ramón Sánchez-Parra García y de su hijo Ramón Sánchez-Parra Jaén correspondientes a las etapas en las que estuvieron al frente de la Enfermería del coso de la Condomina.
MURCIA. Lunes, 05 febrero 2024. Por DIEGO VERA. Foto: Archivo de la familia Sánchez-Parra – Se trata de documentos de incalculable valor que los hijos del segundo, Ramón, Fernando e Ignacio han querido que estén accesibles a los estudiosos y ciudadanos en general, de ahí que hayan decidido hacer esa donación.
Se trata de partes médicos correspondientes a la asistencia prestada en un dilatado periodo de nuestra historia en la primera plaza de la Región de Murcia a diestros como Manolete, Diego Puerta y otros muchos.
Conocí al doctor Sánchez-Parra García cuando comencé a hacer mis pinitos como crítico taurino. Él estaba en sus últimos años como cirujano de la Enfermería. Conocí más a su hijo, que no solo heredó sus virtudes y conocimientos, sino que las acrecentó.
Valoré siempre, y ahora lo hago desde la nostalgia de un tiempo ido cada vez más irrecuperable, sus profundos saberes como cirujano taurino, a la altura de los demás de las primeras plazas de toda España. Y admiré también sus cualidades humanas de honradez, rigor, sentido de la amistad, solidaridad y no sentirse nunca por encima de nadie. Eso que podría llamarse bonhomía y que de él surgía de manera espontánea, natural, sincera.
Esas cualidades supo trasladarlas a sus seres más cercanos, sobre todo, a sus hijos, que no heredaron su profunda vocación por la Medicina, pero que también son un ejemplo de aquellas virtudes.
De su generosidad habla bien claramente el deseo de entregar aquellos fondos documentales de la Enfermería al Archivo, lo que será una realidad dentro de bien poco. Ese gesto supone un reconocimiento más, aunque póstumo, de los partes firmados por aquellos doctores que, sin duda, se alegrarían al poner en los mismos, como conclusión, “pronóstico leve” o “reservado” y que, sin duda también, quedarían apenados si lo llamado a escribir era “grave” o “muy grave”.