UN PLIEGO PARA LA CRISIS / Por Jorge Villar.

El nuevo pliego de condiciones para la gestión del coso alicantino deja bastantes cabos sueltos. Por ejemplo, si serán de abono los festejos añadidos que la empresa adjudicataria puede programar o la participación de diestros, novilleros y picadores de la terreta.

PUBLICADO EN www.diarioinformacion.com

POR JORGE VILLAR. El Ayuntamiento de Alicante ha diseñado durante este último mes un pliego de condiciones para la explotación de la plaza de toros durante los próximos años que se publicará en los próximos días y que ha pretendido, según ha señalado en diversas ocasiones Andrés Llorens, concejal responsable de los asuntos taurinos de la ciudad, bajar el número de festejos respecto a la concesión anterior para atender a los diferentes estamentos de la fiesta en estos momentos de dificultades económicas. El nuevo documento, pues, contiene notables diferencias respecto al anterior. De entrada, en los plazos, ya que ahora se concede la administración del coso por tres años, con posibles prórrogas anuales hasta completar seis temporadas. Se incluye en esta ocasión, además de la explotación de la plaza y del servicio de almohadillas, la del servicio de bar y venta de productos de consumo directo. Ha venido generando cierto malestar la susodicha reducción de festejos, y se entiende cuando nadie especifica que esa reducción se produce en lo referente a la oferta para el concurso. Es decir, que la empresa adjudicataria sí podría programar más festejos además de los ofertados en su plica, festejos sobre los que el gravamen del ayuntamiento se reduciría al 5%. Pero tampoco se especifica en ningún lugar que esos carteles vayan a quedar fuera de lo que se conoce como «abono anual», o sea, los espectáculos a los que el aficionado fiel está obligado a asistir para mantener su localidad. Queda todo esto, pues, a la interpretación de los afectados…
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EL APUNTE DE JOSÉ MARÁA JERICÓ.
En este articulo colgado en la web del periodico no aparece, aunque en la edición de papel si, las más de 600 entradas que en cada festejo la empresa tiene que poner a disposición del ayuntamiento. Más de 300 en la primera andanada para los empleados, que por cierto se les paga religiosamente cada vez que se abre la plaza y tienen que trabajar, y otras 300 y pico directamente para el consistorio, entre barreras, contrabarreras, varias más de las filas 1 y 2 del tendido de capotes, y por si esto fuera poco 11 palcos con 17 localidades cada uno. como veras una autentica provocación a la desmesura y al gorroneo desmedido. ¡Hojala no se presente ninguna empresa! aunque mucho me temo que siempre habra alguno que, aunque sea a la baja, heche un pulso a la suerte que luego pagaremos todos, espectáculo incluido.