Adiós, Alfredo. ¡Qué buen torero se ha perdío…! / Por Juan Lamarca
«…había sido futbolista porque en Argentina todo niño se encuentra al nacer con unabolaa la que darle patadas y de esa forma va creciendo, pero que de haber nacido en España y se hubiera encontrado con una becerra en el campo seguro quehabría soñado con ser torero…»
Sentecia del Papa negro a su hijo Juanito:¡Qué buen torero se ha perdío…hijo!
MADRID. Lunes, 7 de Julio de 2014.-Por Juan Lamarca.Y ahora ya para siempre perdiendo el inexorable partido contra la muerte. Buen aficionado a los toros fue la Saeta Rubia, aunque no pudiera prodigarse tanto por esas plazas, pero sí que nos expresó su admiración por la Fiesta cuando, con ocasión del homenaje que le rindiera el Círculo Taurino Amigos de la Dinastía Bienvenida con Ángel Luis a la cabeza y rodeado de figuras de su tiempo, hace más de una década, comentara en su discurso de gratitud, que él se hizo aficionado en Bogotá cuando jugaba en el equipo del Millonarios y por entonces hacía furor la pareja de Aparicio y Litri en la Santamaría, y con los que trabó amistad.
Añadió de forma muy emotiva que naturalmente él había sido futbolista porque en Argentina todo niño se encuentra al nacer con una bola a la que darle patadas y de esa forma va creciendo, pero que de haber nacido en España y se hubiera encontrado con una becerra en el campo seguro que habría soñado con ser torero.
Pues bien, aproveché la ocasión y le rogué a Ángel Luis Bienvenida que recordara la famosa anécdota con la que tantas otras veces habíamos disfrutado al oírsela en nuestras tertulias de los Jueves, y que me permito reproducir desde la emoción en el recuerdo y veneración a estos dos grandes hombres ejemplares en todo y para todo, Ángel Luis y Alfredo….