CALASPARRA. 2º ENCIERRO. Bonito, rápido y limpio.
Los novillos de Valdellan han empleado 2’ 17’’ desde los corrales en la Plaza de la Constitución hasta la entrada en la plaza, y 2′ 44’’ tiempo total a la entrada a los corrales de la Plaza de Toros.
CALASPARRA (Murcia). Martes, 4 de septiembre de 2018. REDACCIÓN.- Foto: Pedro Navarro »LAFORET» – Mañana con cielo encapotado y agradable temperatura, y ambiente extraordinario, el habitual. Mucho más publico que ayer en todo el recorrido del encierro. Tras el puntual cohete que prende cada mañana el buen mayoral y corralero Eulalio que avisa de la salida de las reses.
Los novillos-toros de Valdellan (encaste Santa Coloma) de excelente presentación y las hechuras propias del su encaste, predominan las capas cardenas oscuras. Han hecho un recorrido realmente bonito, rápido y sin percances. Desde la salida tomó la cabeza uno de los de Valdellán seguido de cerca por tres cabestros y a continuación el grupo; en el primer tramo, calle Lavador, quedó muy descolgado el último. El recorrido ha tenido muy buen ritmo y el galope ha sido realmente bueno y continuado, y sin sustos. En el último tramo, calle Ordoñez, volvieron a agruparse, excepto el último que no recuperaba sitio pero que mantenía con buen ritmo su persecución a la manada. La entrada a los corrales de la plaza ha sido rápida y sin complicaciones.
Como cada mañana tras el encierro suelta de vaquillas en la plaza de toros para los más valientes, y en toda Calasparra la Feria y Fiestas en todo el esplendor, la alegría y emociones propias, y con un completisimo programa para todos.
En la Casa de Cultura a las 13 horas, los Aperitivos Taurinos, organizados por la Asociación El Quite, con los protagonistas de esta tarde en la segunda de abono. Y finalizadas las novilladas las Tertulias Taurinas organizadas por el Club Taurino de Calasparra.
De otra parte, el mozo cogido ayer en el primer encierro tuvo mucha suerte… -la Virgen de la Esperanza le echó su manto-, está fuera de peligro tras la intervención quirurgica de ayer en el Hospital de la Arrixaca de Murcia, y en las manos del gran cirujano Dr. Ricardo Robles y su extraordinario Equipo Médico. La cornada fue realmente grave por la zona donde penetró el pitón y por el alcance de las lesiones, pudo haber sido irreparable. Afortunadamente el herido se recupera satisfactoriamente, gracias al Dr. Robles y su equipo, y Gracias a Dios.