EN DEFENSA DE LA TALANQUERA / Por Juan Lamarca
Por Juan Lamarca Madrid, 21 de Mayo de 2011. Escribe Ricardo Díaz-Manresa “si cae Madrid, caemos todos”. Hay quien afirma que con la lamentable degradación de la corrida –visto lo visto en esta feria- en la plaza de Las Ventas, esta se ha despeñado a una profunda sima; otros aseguran que el prestigio de la monumental madrileña ya estaba por los suelos, que ya había sido tomada por el antitaurinismo de los taurinos ante la estulticia del público, la complicidad de los medios y la bendición de una autoridad en connivencia.
¡La talanquera de Las Ventas! Así se le llama últimamente con animus injuriandi a la catedral del toreo, sin embargo la que sale perdiendo en la comparación es la propia plaza de talanqueras, humildes cosos levantados cada año en las fechas de sus fiestas patronales con carros de mulas antiguamente y hoy con tractores o módulos portátiles, con el esfuerzo de sus ayuntamientos y con el entusiasmo de sus laboriosas gentes…