El de Foios sale a hombros en la corrida de la Fira de XÁ tiva en su vuelta a los ruedos tras 21 años sin vestirse de luces – Daniel Luque y Román le acompañan en su tarde triunfal en la plaza en la que tantos éxitos cosechó entre 1980 y 1992

XÁTIVA (Valencia). Domingo, 17 Agosto 2014. Publicado en www.levante-emv.com ENRIQUE AMAT | VALENCIA Una de las mejores canciones de Fito y Fittipaldis, la titulada Donde todo empieza, se inicia con la siguiente estrofa: «Puede que no valga la pena escribir, tan lejos de la poesía. Todas las palabras que te quiero decir, se me rompen enseguida. No me quedan flores, me arrancaron la raíz». Algo de eso es predicable a la hora de tratar de relatar lo que se produjo ayer en la plaza de toros de XÁ tiva. Tanto porque empezaba algo, una nueva etapa en la vida de un hombre, como porque se hace difícil tratar de poner negro sobre blanco todo cuanto rodeó al antes, al durante y al después de la corrida de toros de su feria: un festejo cuyo principal aliciente era la vuelta a los ruedos de Vicente Ruiz, El Soro, tras veinte años de ausencia y más de cuarenta operaciones sufridas en su maltrecha pierna.

Era una tarde que se planteaba rodeada de emociones y de recuerdos, y también de incertidumbres y con un difícil pronóstico en lo que podía ser su desarrollo. No era fácil adivinar qué era lo que ocurriría y cómo le iban a ir las cosas al coletudo de Foios. Una incógnita tan ilusionante como inquietante. La de ayer no era una corrida más. Era el regreso a los ruedos de un hombre que fue figura del toreo, que lo tuvo todo y al que las lesiones y algunas circunstancias convirtieron por momentos en un juguete roto, como aquellos que reflejó Manuel Summers en su célebre película del mismo nombre. Tras años de lucha, esfuerzo y sacrificio, Vicente ha logrado salir del túnel y, a pesar de las adversidades y sus limitaciones físicas, vestirse de luces y llegar a un portón de cuadrillas. Dispuesto a hacer el paseíllo junto a dos toreros que, cuando él hubo de retirarse de los ruedos, apenas eran unos niños con babero. Su última actuación en XÁ tiva había tenido tuvo lugar el 18 de agosto de 1992. Aquel día fue ovacionado tras lidiar un lote del Marqués de Ruchena alternando con José Antonio Campuzano y Enrique Ponce. VER COMPLETO EN ENLACE