«..En el ambiente de cordialidad y hermandad que caracteriza a nuestra asociación se expresaron los sinceros deseos de vivir unos felices días navideños, y que el nacimiento del Niño Dios sea el toque de clarín para la llegada de nuevos tiempos de cordura, sensatez, y de recuperación de valores y de «vergúenza torera» para el bien de España y de su Fiesta: los toros…»

Madrid, 10 de Diciembre de 2014. Gabinete de Prensa C.T.A.D.B. / Fotografías: la Loma. Cuando nuestro presidente don Fernando Claramunt elevó su copa de vino, el destellar de las burbujas entre dorada transparencia evocaron a todos y cada uno de los amigos que se fueron a lo largo de estos casi tres lustros de andadura de nuestro fraternal Círculo. Por ellos, a su memoria fue el brindis de don Fernando y por los ideales y valores compartidos que constituyeron el fundamento del nacimiento de nuestra asociación taurina allá por el último año del siglo pasado, también en tiempos de Navidad, con nuestro querido Ángel Luis (q.e.p.d.) como estandarte viviente y siempre sonriente de la gloriosa dinastía torera de Bienvenida.
Y así fue como en esta ocasión se trasladó nuestra tradicional convivencia navideña al Capítulo de Las Rozas de Madrid, presidido por el entusiasta aficionado, a la vez que entrañable amigo Manolo Polo, ubicado en el inigualable restaurante de aires rocieros presidido por la imagen de Nuestra Señora y que todos los días recibe la adoración mariana de sus clientes con el cántico «la Salve», al cierre del local que, naturalmente, lleva el nombre de Restaurante «El Rocío».
En aquel marco de españolía, tal como gusta definir al Dr. Claramunt, se resaltó la vinculación a través de sentimientos de hispanidad y de devoción taurina, con los respectivos Capítulos bienvenidistas que se reparten por la geografía americana, y la ingente labor desempeñada en pro del fomento y divulgación de la tauromaquia y de la defensa de las corridas de toros, que al igual que en España está siendo objeto del acoso y hostilidad por la fuerzas de la sin razón y propaladoras del odio a España a través del toro como símbolo inequívoco de identidad hispana.
Las palabras de don Fernando, secundadas por las intervenciones de Juan Lamarca, Juan Miguel Núñez y Miguel Bienvenida, dejaron bien claro que el Círculo Bienvenida continuará con firmeza su línea de actuación que se trazó desde su fundación y que no es más que contribuir, desde el respeto a la historia del toreo y a sus protagonistas, al mayor prestigio de la Fiesta Nacional y, ahora más que nunca, a hacer frente a las hostilidades que desde el campo político, administrativo, social y mediático, se perpetran en contra de la legal y legítima existencia de la corrida de toros y del derecho de los ciudadanos.

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