Cargar La Suerte (II) / Por Rafael COMINO DELGADO.
<<LECCIONES MAGISTRALES>> RAFAEL COMINO DELGADO.
Puede admitirse que hoy día hay dos formas de entender »Cargar la suerte»: La primitiva, propuesta por Pepe ILLO; y otra, más moderna, que es como la entienden José A. del Moral, Antoñete, don Álvaro Domecq…
Para nosotros, y basándonos en cuanto hemos revisado y hablado con profesionales, puede admitirse que hoy día hay dos formas de entender este concepto: la primitiva, propuesta por Pepe ILLO, que consiste en desviar la trayectoria del toro en el momento del embroque, lo que se hace generalmente echando la pierna de salida hacia delante, pero no necesariamente, puesto que puede hacerse solo sacando los brazos; y otra, más moderna, que es como la entienden José A. del Moral, Antoñete, don Álvaro Domecq, en la que lo fundamental es alargar el muletazo y cargar el peso del cuerpo sobre la pierna de salida.
Entiendo, o quiero entender, que ello conlleva desviar la trayectoria del toro al final del muletazo para vaciarlo detrás de la cadera. En el primitivo concepto de Cargar la Suerte había que desviar la trayectoria del toro si estabas colocado en su rectitud, porque de lo contrario nos lo echaríamos encima. Ello es válido cuando se cita a una determinada distancia del toro y en su rectitud. A esa distancia incluso daba tiempo a adelantar la pierna de salida una vez el toro ya se había arrancado, como exigían Rafael ORTEGA (1986) y Luis Miguel DOMINGUÍN (2002), pero hoy, en muchas ocasiones, se cita a una mínima distancia del toro con la muleta muy adelantada y, en ese caso, se lleva largo y al final se desvía la embestida hacia detrás de la cadera, lo que sería la segunda forma de concebir cargar la suerte. Citando a tan corta distancia pretender adelantar la pierna contraria una vez que el toro se ha arrancado es imposible, no da tiempo y el toro arrollaría al torero.
Pero el maestro CAMINO, en el libro “Paco Camino. El Mozart del toreo”, de Carlos ABELLA (1994), afirma categóricamente que, “si no desvías la trayectoria del toro, no cargas la suerte”. Pero creo que él se refiere a desviarla en el momento del embroque. Además, la afirmación del maestro CAMINO, exigiendo desviar la trayectoria del toro, contradice totalmente el concepto de Cargar la Suerte expuesto por don Alvaro Domecq,
Antoñete y el Juli, que solo exigen cargar el peso del cuerpo sobre la pierna de salida, pues se puede hacer eso sin desviar la trayectoria del toro. Yo me quedo con la opinión de Paco CAMINO, posiblemente la mayor inteligencia que ha habido en el toreo (El VITI, 2007), pues creo que es la más acertada, de acuerdo con el concepto inicial de Cargar la Suerte introducido por Pepe HILLO, y que cada uno piense como guste. Si se echa la pierna de salida para adelante se consigue desviar la trayectoria del toro más plenamente que con los pies juntos y solo sacando los brazos, pues con los pies juntos se puede “Cargar la suerte”, pero menos.
Como opuesto a Cargar la suerte se suele decir que un torero “descarga la suerte” cuando en el momento del embroque echa la pierna de entrada (izquierda cuando torea con la mano derecha, y derecha cuando torea con la izquierda) hacia atrás. Otros, cuando hablan de descargar la suerte, se refieren a esconder la pierna de salida, si bien el Juli afirma que ello no importa siempre que esté descargado el peso del cuerpo sobre esa pierna.