<LECCIONES MAGISTRALES> POR RAFAEL COMINO DELGADO -Catedrático Universidad de Cádiz-

La Fiesta de los toros es un espectáculo artístico caro, por lo tanto, si queremos competir con otros espectáculos sean artísticos o no, es necesario buscar fórmulas para abaratarlo.

Creemos que son dos aspectos, fundamentalmente, los que lo encarecen: El canon de la plaza y las cifras que cobran algunas figuras, muy pocas.

Las plazas suelen ser propiedad de las diputaciones, ayuntamientos o privadas. En los tres casos elaboran unos pliegos de arrendamiento, la mayoría de las veces, absolutamente imposibles de asumir por un empresario serio, que quiera cumplir lo firmado. Creemos que están exprimiendo en exceso sus inmuebles, y ello puede acarrear el que llegue un día en que el negocio no sea rentable porque no haya arrendatarios.

Algunos ayuntamientos lo están haciendo bien, pues se han constituido en empresa, contratando para ello a profesionales que conocen este mundo, y sus resultados están siendo muy buenos, caso de Roquetas de Mar. En Francia suelen gestionar algunas plazas asociaciones de aficionados, lo que también da buen resultado.

En definitiva, o cambian de mentalidad los propietarios de las  plazas, o matarán la gallina de los huevos de oro en pocos años. Claro que a veces se elaboran esos pliegos por políticos, totalmente ignorantes en el mundo del toro, y de antemano lo que pretenden es hacer daño a la Fiesta, impedir que se den toros. Es el caso de Podemos en los ayuntamientos que tiene poder. También otros partidos, como IU, Bildu, e incluso el PSOE.

El otro componente son las figuras. Deben comprender y asumir que la Fiesta está atravesando un momento muy difícil, y ellos son los primeros, o deberían serlo, en ayudarla. La pueden ayudar aceptando ganar algo menos dinero para que determinados empresarios de nivel medio o pequeño, y también compañeros más modestos, puedan funcionar. Manuel Benitez “El Cordobés”, suele decir que, “los toreros deben reclamar lo suyo, pero nunca robar la cartera a empresarios y aficionados”. Y lo dice uno de los toreos que más dinero ha ganado en el Toreo, pero con la inteligencia suficiente para darse cuenta, como también dice, “nosotros existimos- los toreros- porque hay aficionados y empresarios, por tanto, debemos tratarlos bien”. Benítez además de gran torero siempre fue un hombre extremadamente inteligente, como lo demuestran las dos frases que, de él, hemos citado.

La idea de que en el toreo hay que estar el menor tiempo posible y hacerse lo más rico posible, y el que venga detrás que arree no es válida, en este momento, para todo aquel que de verdad ame la Fiesta de los toros.